El pasado martes 10 de mayo se ponía en marcha la #línea024, un recurso del Ministerio de Sanidad que pretende reforzar la salud mental en España dando cobertura gratuita tanto a las personas que puedan tener conductas #autolíticas como a sus familiares y allegados las 24 horas del día, los 7 días de la semana, los 365 días del año.
Actualmente el suicidio es la primera causa de muerte externa en nuestro país y la primera causa de muerte en jóvenes y, según datos del INE, en 2020 se registraron 3.491 muertes por suicidio en España, lo que supuso un 7,4% más que en 2019. En esta línea, el teléfono 024 aparece como respuesta a una demanda de la sociedad para visibilizar, acabar con los #estigmas y #tabúes que existen en torno a esta realidad y para romper los silencios que han pesado como losas durante años sobre ella.
ROMPIENDO MITOS Y TABÚES
Alrededor de las conductas autolíticas hay multitud de creencias que distorsionan una realidad que está más presente en la sociedad de lo que creemos. Algunas de ellas son:
Los medios de comunicación no tienen que hacer eco de las conductas suicidas para evitar el efecto llamada.
El suicidio no se puede prevenir.
Las personas que avisan a su entorno de sus intenciones autolíticas al final no hacen nada. Quien realmente quiere hacerlo no dice nada.
Los intentos de suicidio son una llamada de atención.
Las personas que se suicidan son egoístas (o valientes).
La mayoría de los suicidios son de manera repentina, sin advertencia previa.
Solo las personas con trastornos mentales se suicidan.
El hecho de hacer publicidad y visibilizar esta realidad hace que se rompa el silencio que rodea al tema del #suicidio, eso junto con un buen plan de prevención e intervención pueden ser las herramientas fundamentales para sacar a la luz esta problemática y poder brindar a las personas que la sufren el apoyo necesario. Los medios de comunicación, lejos de fomentar el llamado “efecto llamada” podrían llegar a ser el soporte perfecto para llegar a todos los hogares y contribuir a la prevención de las conductas autolíticas.
Las sombras que envuelven este tema hacen que sea muy difícil que la persona que piensa en quitarse la vida pueda verbalizarlo a alguien de su entorno, cuando esto sucede hay que interpretarlo como una llamada de socorro (y no de atención) y facilitarle que pueda expresarse con naturalidad y calma. El suicidio se puede prevenir si en lugar de asustarnos con la idea o quitarle importancia en base a mitos e ideas preconcebidas podemos proporcionar a la persona apoyo y seguridad para poder hablar de ello.
Son muchos los intentos autolíticos consumados que previamente habían verbalizado o dado muestras de su intención a su entorno. Por lo tanto, ni los intentos son llamadas de atención ni solo lo consiguen los que no avisan y lo hacen de manera repentina.
Aunque queda mucho camino por recorrer en la salud mental publica de nuestro país, iniciativas como estas hacen que poco a poco se vaya dando luz donde antes solo había oscuridad y silencio.
Lorena Atienzar del Toro
Psicóloga Col. Nº M-25199
Centro Psicológico Loreto Charques
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